RONDAS DE ESCRITURA 2019

"Las cosas tienen movimiento"
Encaramos el Sonar de los Resultados con las tres rondas de escritura que están cerrando el tránsito de este 2019 en el taller Aproximaciones al texto.
El convite va de compartir, mostrar y sonar (soltar) textos que han nacido en tiempo de taller.

La cosa es el sábado 7 de diciembre, inicia a las 20:30 y se extiende hasta la media noche, en la sala Ceccarini del Centro Cultural Cidade. El espacio es calientito, pueden llevarse tereré, líquidos refrescantes; si se animan, un matecito.
Escribiremos, leeremos, escucharemos, cantaremos, reiremos, yoraremos (si nos animemos) y mismo que nos abrazaremos (si encendemos)

Amigues que llevan la música dentro, les amigues del sonar, acompañarán la velada.
Eso. Les esperamos.


La entrada gratuita es.



#rondasdeescritura #aproximacionesaltexto #rondalagurisada
#jugareltexto #sonareltexto
#sonardelosresultados


El taller se desarrolla desde el año 2012 en la ciudad de Posadas, destinado a jóvenes y adultos con ansias de transitar experiencias de escritura y de comunicarlas. Jugar/Sonar/Herrar el texto son los rumbos que guían el tránsito. Contacto: carlacurti@gmail.com

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EL SONAR DE LOS RESULTADOS

MUESTRA / RECITAL DE TEXTOS


Viernes 7 de diciembre
Sala CECCARINI - 20:30 hs
Centro Cultural Vicente Cidade
Belgrano y Gral. Paz – Posadas

Entrada Libre y Gratuita


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(respiro)


“qué bueno que es martes
siempre me gustaron


el verdadero inicio de la semana
el que te escupe al tacho
el que existe
sólo porque estás pagando algo
además
el primer fuego robado adhiere
a cualquier clima invocado en el ascensor


tengo tiempo
entonces lucho
porque es la vida que me quitan
amor por lo que hay
y me generan molestias musculares
maleza de urbe
cebo troncal de buen ciudadano


así me sentí cuando salí al hall de entrada
con la correa del vecino
a pasear con mi perro y saludar a mi novia


que duele transcurrir
que cada día miro el suelo con más detalle
que somos los golpes, la herida
no es primavera
es la pólvora que saca todo afuera


RdS

El Motivo, el Cauce, el Poema. Se me ocurrió convidar a Juan y vino Juan y nos puso a laburar con la ocurrencia. Hubo que sondear, que buscar, que encontrar, que convenir, hubo que registrar y desgranarla, meterle ganas o dejarla, hasta que dijo, la ocurrencia dijo, empezó a decir alguna cosa al oído, al oído de adentro, de adentro de uno, vino la ocurrencia a mostrar lo propio: ese cachito de espacio en el adentro. Intimidad que interpela, ¿a quién? Acá, ahora: tomála, armála, amála y despojate. Soltala y fijate cómo y cuánto se despluma, ¿necesita todas esas plumas para salir a volar? soltar lo que sobra, sosobra y le mete peso al ala. Despojo; volar con lo necesario.
Hace tiempo no registraba tanta adrenalina en un juego de escritura como escribiente activa, llevada por otre; es un sano ejercicio dejarse guiar (otro despojo), allanarse ahí, dar la rienda a voces otras que ofrezcan nuevas posibilidades, permitirse ver. Conmoverse, moverse con.

Apunte de ideas dichas


“Ocurrencia.”
“El momento gatillo.”
“La primer idea como excusa para contar otra cosa.”
“Desencantarnos de lo que producimos, para trabajarlo.”
“Despojo. Sacar lo que sobra hasta que quede con lo necesario, en pie.”

pero qué bueno que es martes
y me mandaste ese emoticón que se aleja
te asesina la mirada pensando en tu sonrisa


la que podía palpar
y que se esconde”



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Semana 18 del Taller #Aproximacionesaltexto
Un convite sigue siendo una ocurrencia maravillosa; una apertura.
Gracias Juan por compartir generosamente la desarticulación de tus procesos creativos, por venirte a la mesa, a rondearla.
Gracias a la Ronda II, inmensa.
“Que el mientras tanto también sea interesante”, dijo.








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Poema que abre y cierra este Registro de Sensaciones: unaudio, Juan Báez Nudelman, en Tremendismos, 2017, ed. Raymond.

Juan Báez Nudelman escritor, actor, anfitrión, murguero, radiofónico, audiovisual, productor, periférico, poeta. Contactalo/conocelo/leelo en redes: Trilce Editorial / Ciclo Trilce (mensual en Café Colón-Posadas) /  Fanzines (música)

Carla
agosto 2019

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Otro Registro Sensacional

Semana 14 de las rondas de escrituras del taller. Me replanteo la idea de volver al diario cuasi íntimo, al periódico de registros que van tejiendo este ciclo de tránsitos. No siempre ocurre, pero me gusta llegar temprano (tanto como irme tarde) porque son esos espacios fuera de la hora del acuerdo de todo encuentro cuando suceden hechos asombrosos. En la tarde del día de San Juan la puerta de la Kowalski fue abierta por un sujeto que al momento del ‘hola’ pareció sorprendido y a la vez contento de verme entrar, de ver entrar a alguien con intenciones de quedarse, pienso; pienso ahora porque allí no hubo tiempo de pensar, el saludo inauguró la entrada a un verdadero tiempo de juego, tiempo de misterios develar.



Así, rápidamente, empecé a conocer a Rubén.



Las salas de muestras suelen llenarme de preguntas y me resultó extraordinario encontrar al autor de las obras que se exponen allí desde el 13 de junio bajo el título AFICHES. Le conté a Rubén que días atrás dos niñes ingresaron a la sala mientras yo preparaba las mesas para darle a la escritura y que con algo de pudor decidí contarles de qué se trataba lo que estaban viendo; los tacos de madera tallada llamaban poderosamente su atención y procuré explicar la manera en que se confeccionan, las herramientas que se utilizan, el uso que se les da y el trabajo paciente que todo esto implica, la xilografía… Fui atrevida, admito, pero esto dio pie para que el hacedor me introdujera en su proceso; entonces la niña sorprendida fui yo.





Con amabilidad comenzó a explicarme los detalles de casi todos los elementos exhibidos. También me ofreció de las torraditas que había comprado para la merienda. Los rondistas fueron llegando y con más atrevimiento todavía convidé a Rubén a conversar con la ronda.
Esto fue un abrupto en la planificación, en el guión imaginado para la tarde, pero permitió ejercitar la escucha, el paseo narrativo de la historia de una vida ajena aproximándose gentilmente, abriendo la posibilidad de rondearla con quien también hace la cosa, a conectar con el saber por el hacer, por el ‘manos a la obra’. Lo maravilloso: se quedó hasta casi las 22, cuando ya todos debíamos partir (¡O nos echaban! —risas—.)

La ronda I compartió la conversa amena, desde los detalles de recuperación de máquinas obsoletas para el mundo del diseño gráfico moderno hasta las habilidades del pícaro y del buen bailador. Una recorrida intermedia por el mundo de la granja y la cría de pollos, los menesteres de la labor familiar, las tradiciones de los oficios, la litografía, la xilografía, las noches en la imprenta, algunos sinsabores, las movidas en el  Cerro Pelón, los números de la revista ‘EL BALCÓN’ y tantísimos recortes de una historia local prácticamente ignorada (al menos por mí), condimentaron la charla en la que cada enunciado insinuaba el rizoma de cuentos que buscan des-silenciar desde los surcos que las gubias dejan en la madera para la estampa.  Un poeta, Rubén. “Cada obra tiene su historia, su tiempo, su ritmo”, dijo.



Territorio Afiche

Al día siguiente, bajo lluvia y ya helándose Posadas, otra vez llegué antes de la hora pero temiendo que el clima hubiera atajado al amigo en su casa, no obstante al entrar vi a Rubén platicando con visitantes y con una nueva bolsa de torraditas dispuesta sobre la mesa. Sin drama, Rubén jugó con la ronda II y nos orientó desde su mirada a una aproximación al territorio afiche. Lejos de intentar abordar la madera para el grabado, sobre todo por limitaciones de tiempo, encaramos la actividad con materiales más accesibles que nos permitieran intentar pasar de un poema al modo afiche. La comanda general la dio el experto, tips, consideraciones básicas: sintético, leerse al paso, mostrar un concepto y, se puede ilustrar. Así, jugamos el texto.












“El empujón para quedarse”

Esta frase usó Rubén para contar cómo fue que eligió pasar sus días en la imprenta. Lejos del empujón para irse, él se quedó, y en estas jornadas insospechadas nos transmitió una buena parte de sus conocimientos, de sus sentires, de su experiencia. “—Para mí es un placer; disfruto de leer una página de diario, bien armada, tanto como otros seguramente disfrutan leer un cuento, escuchar música…” Nos paseó por las formas del grabado, las maneras de dejar registro. Se situó en lo obsoleto para marcar la distancia en las formas del hacer con las nuevas tecnologías, la mano puesta en el gusto por la artesanía: “—Evito la comunicación erudita; prefiero lo simple. No abuso de la gubia; es como abusar de los recursos; tiendo hacia lo simple porque me resulta cálido (…) Entonces me pregunto, ¿qué le pongo al taco? Y el taco me va dando el texto aunque ningún texto es mío, lo voy tomando, de prestado quizás…” Palabras más o menos dichas, en el ánimo de la ronda.


El intercambio

El martes Rubén me ofrendó un ejemplar de su libro, a cambio fue a su mano un ejemplar de LO QUE MUERE (2015), poemario manso y artesanal, gran trabajo de los Mercurio, impreso en serigrafía tradicional, cosido a mano, “—¡Qué bárbaro esto!—”, dijo Rubén.

A mis manos llegó ANTES QUE SE PONGA EL SOL (2016), que reúne una serie de cuentos basados en la experiencia que le dicta su memoria; muchos son cuentos que salieron de apuntes, de cosas vividas, anotadas… Contó que fue un lindo ejercicio el tiempo de arreglarlos a los textos, de pulirlos, “—Un año de pulido. Es un lindo ejercicio la revisión, es como volver a buscar. Soy imprentero; entonces lo imprimí y lo presenté. Así,  el libro de cuentos y con otro libro de otras cosas. Ambos dicen vivencias mías, o cosas que escuché; ficcionadas. Estuve un año para revisarlos a todos, para hacer lo que sería la corrección; que por otro lado no es de tipo estricto en el sentido de que el criterio viene siendo ‘me suena bien o no me suena’…”. Y sonreí, otra coincidencia en la importancia del sonar.


Tres frases

“Siempre fui, antes que reaccionar, de esperar a ver qué pasa.”
“Yo no bailo nada suelto y siempre bailé por afuera.”
“Yo no soy profesor de nada, pero un día se me ocurrió...”


Yo creo que también se le ocurrió decir que sí y entró a la ronda a jugar, quizás sólo para ver qué pasa.

Gracias a las hermosas rondas por transitarla. Gracias enormes Rubén Díaz, por la generosidad de tu tiempo.


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Del poema al afiche:


Hay que buscarlo

En la eropsiquis plena de huéspedes entonces meandros
de espera ausencia
enlunadados muslos de estival epicentro
tumultos extradérmicos
excoriaciones fiebre de noche que burmua
y aola aola aola
al abrirse las venas
con un pezlampo inmerso en la nuca del sueño hay que
buscarlo
al poema
Hay que buscarlo dentro de los plesorbos de ocio
desnudo
desquejido
sin raíces de amnesia
en los lunihemisferios de reflujos de coágulos de espuma
de medusas de arena de los senos o tal vez en
andenes con aliento a zorrino
y a rumiante distancia de santas madres vacas
hincadas
sin aureola
ante charcos de lágrimas que cantan
con un pezvelo en trance debajo de la lengua hay que
buscarlo
al poema
Hay que buscarlo ignífero superimpuro leso
lúcido beodo
inobvio
entre epitelios de alba o resacas insomnes de soledad en
creciente
antes que se dilate la pupila del cero
mientras lo endoinefable encandece los labios de
subvoces que brotan del intrafondo eufónico
con un pezgrifo arco iris en la mínima plaza de la frente
hay que buscarlo
al poema

Oliverio Girondo, En: LA MASMÉDULA










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La muestra puede visitarse hasta el sábado 29 de junio en la sala Kowalski del Centro Cultural Vicente Cidade. 

Si vas por la tarde, te lo encontrás a Rubén



Posadas-Misiones
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RdS

Venimos transitando el octavo ciclo de rondas de escritura que es la propuesta del taller Aproximaciones. Me gusta pensar la ronda como una forma de acceso al conocimiento. Me gusta pensar en tres grandes maneras de rumbear el camino de la textualidad, el jugar, el sonar, el herrar; me gusta preguntar ¿cómo le entrás al texto?

Cada tanto convido a alguien a prenderse de una vuelta de ronda para darle un aire diferente (un invitado siempre lo es); una vuelta de tuerca mientras la ronda se asienta; una voz amiga que quiera jugar sin más demanda que la de estarse con nosotres las horas que pide la actividad y animarse a contarnos su propia experiencia en las cosas del texto. En esta oportunidad se aproximó un ser que lleva la vida en el trabajo de sonar. Su territorio, la canción, vino a abrir un diálogo despojado de juicios sobre lo que íbamos a hacer, que por otro lado, ni yo sabía.

Me despacho hoy con este registro de sensaciones que queda chico porque cuando la lágrima aparece en una conversación cordial no hay aparato que registre objetivamente; el rastro del sentir queda acá como una forma de agradecimiento por compartir y por abrir el hondo que cada uno sospecha.

Tras la propuesta del caligrama la risa giró en torno a la petición de la consigna de escritura: producir un texto, utilizando determinadas palabras, cuya forma final resultara un pájaro. ¿Qué entendemos por forma final? ¿Cuál es la forma final de un texto? Claramente el cuerpo del texto escrito nos revela una forma, podemos decirle cuerpo, acá le llamamos ‘territorio’; la cosa es que cuando la duda se instaló inmediatamente pensé en el invitado y sonreí muy interiormente, lo parafraseo para decir que en ese momento me di cuenta de que toda forma final es una forma fugaz. El texto como forma final es eso, además, una forma fugaz. Un estallido.








Entre otras itinerancias, llegamos a la cosa esta de la repetición; comentamos cómo nos escolarizan en la textualidad y en estrategias para evitar a toda costa las repeticiones. ¿Qué pasa entonces con el estribillo de una canción, que se repite? Entrábamos en esa historia, empezamos a pensar en la repetición como recurso y no como recaída: “El riesgo de correrse de la repetición es que se puede perder la unidad (…) Hay fórmulas populares, formas, figuras, estructuras, figuras, danzas. El chiste, formular algo por sobre la estructura que genere novedad”, dijo Osvaldo; algo así. Y entonces se nos vino la idea del mantra y om om om…



Osvaldo de La Fuente viene sonando el texto como forma de trabajo desde 1987; cuando me tocó presentar su laburo, hice trampa porque elegí la canción que más me gusta, sin consultar. La llevé a texto y propuse leerla como poesía (como si no lo fuera…) ‘Con la muerte alerta’ pertenece al último disco llamado Lumbre, es el número 14 y se desliza por formas folclóricas. No más que la oportunidad de conversar a partir de un texto con el hacedor, con quien soltó ese pájaro (que no tiene forma de pájaro pero vuela, ¿lo pueden ver?) destapó un cántaro de pensares y sentires que considero invaluable, aunque tesoro, o trofeo de la vida; el encuentro.


Luego de leer el texto y de sonarlo, oh, el ejercicio de sonar el texto y el resonar en cada hondura. Te dan unas ganas de aplaudir, de llorar, de sacarte las ropas, de bailar para que llueva si es que no llueve, de que sea de siesta una fiesta y abrazar a todes. Abrazarse.
Quizás estemos coincidiendo en la propuesta del lugar de asombro. Estarse “con la muerte alerta”, estarse uno siendo lo más uno que se pueda, que se sienta; uno que se sienta en la ronda , con el otro, con otros, con otres. Aproximarse así, despojados de ‘pre’, la posibilidad que es une en relación siempre con el otre, que es otra posibilidad. La ronda de las posibilidades.



Ya sé que a veces la cosa puede parecer bien sonsa; probablemente sí, probablemente eso sonso resuene en el muro que nos venimos construyendo. Quizás lo sonso pique justo ahí y sin más nos demos cuenta, porque ¿qué pasa si nos damos cuenta de que lo sonso es una estructura y todavía no le encontramos el chiste? Lo sonso es un lugar común, construido. El desafío es volverlo asombro. Estarse sonso pero con la muerte alerta. Un filo. Y está acá, está entre.



No hay otro registro que pueda contradecir lo atesorado por la sensación, este es un registro puramente sensacional. Gracias a la ronda. Gracias Osvaldo, por venirte a jugar con nosotres.









Con la muerte alerta
https://youtu.be/ix54Pr9HTgM





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RdS
A veces quien guía
es un hilo de intuición
un querer estar jugando
presente único compartido
un al final reír un al final sin
un al final sin y
un acaso no sé
yo tampoco pero estoy
yo tan poco pero estoy
a veces quien guía
es un filo de intuición
un querer estar armando
aunque prófugo un sentido
una trama ya, para mañana
por si perdiera los caminos
por si acaso también
por si acaso
por sí


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***

RdS. Correrse.



Quién te cuenta la cosa?
Desde dónde ve la cosa?
Cuánto sabe de la cosa?
Qué cosa el ángulo
que apenas cambia
dice más de quien dice
que lo que dice de lo visto.

Parece zoncera(?), pero no.

13/5/2019

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***
RdS
Moverse del lugar conocido, ascender; si conocido, rehabitar...
De cuántas maneras caminamos el mismo espacio para sentirlo otro?
Una ronda respira, bardea, babea.
Una ronda se resiste, insiste, baja a piso, silencia.
Suena la voz de la ronda que apenas empieza a reconocerse, se ajena de a ratos para mirarse sola: la ronda respira, putea, ronronea
menos mal que se acuesta
que se va acostando
sobre más preguntas
que sobre respuestas.
7/5/2019






***
Volante
el tiempo urge y desurge,
palabrea a pulso de ronda.

#Ronda1 #jugareltexto #tallerdeescritura#aproximacionesaltexto #poetry #lahermanalimada
— en Centro Cultural Vicente Cidade.
16/4/2019
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***
La Ronda está completa.
Abundancia de rondistas para este ciclo. Tres veces gracias.
#rondadeescritura #aproximacionesaltexto#tallerdeescrituraposadas #jugareltexto #poetry#lahermanalimada @centroculturalcidade
@carlacurti79
 — en Posadas.

2/4/2019

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***
"Algo parecido/a mí/espera/ser/descubierto."
Madrugada, de Tom Lupo

Bienvenida, la Ronda 2. Se va la segunda. Dijo.

#Ronda-II #aproximacionesaltexto#tallerdeescrituraposadas #poetry #jugareltexto#lahermanalimadar
 — en Posadas.

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***
Ronda 1
La magia de hacer con. La eclosión del silencio ritmado por los trazos que la mano sutura sobre la tecnología del papel. Cada inicio, una chispa. Arderemos, dijo.

Bienvenida la Ronda que abre el octavo ciclo de tránsitos de experiencias de escritura.
Agradecida.
26 de marzo 2019
#vamosalcidade #tallerdeescrituraposadas#aproximacionesaltexto #jugareltexto #poetry#lahermanalimada @centroculturalcidade @carlacurti79
 — en Posadas.

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